La maldición del Lago Pirámide en Nevada

En el mundo existen muchos lugares considerados malditos. Algunos son siniestros como el Cortijo Jurado en Málaga, España, o la Rectoría de Borley, la casa más encantada de Inglaterra, pero otros son parajes de singular belleza. El que nos ocupa es uno de estos últimos lugares. Bajo la superficie de un hermoso lago, la leyenda perturbadora de las muertes que ocurrieron en el lugar se oye en forma de susurros


El Lago Pirámide es un lago salado que se encuentra en el estado de Nevada, en EE.UU. y actualmente forma parte de una reserva india. Por su singularidad es un lugar muy visitado por turistas y lugareños. Toma su nombre de una formación de piedra caliza en forma de cono que sobresale en el agua. La belleza del lugar, que incluso utiliza Apple como una de las imágenes de protección de pantalla, esconde oscuras y misteriosas historias de asesinatos, maldiciones, desapariciones y extrañas criaturas.

Desde tiempos ancestrales la tribu Paiute vivía en los alrededores del lago. Existía una leyenda que hablaba de un hombre que se enamoró de una extraña criatura, semejante a una sirena, que habitaba en el lago. La llevó al poblado para casarse con ella y sus vecinos se burlaron instándole a que la devolviera al agua. La sirena, enfurecida, maldijo al pueblo y dijo que todos los que vivieran cerca del lago sufrirían desgracias y penurias. También creían que en el agua vivían unos seres demoníacos semejantes a pequeños diablos que arrastraban a la gente hasta el fondo del lago y que eran los espíritus de los bebés paiute no deseados y asesinados en el lago.

Cuando los europeos empezaron a llegar a la zona del lago Pirámide, los paiute vivían y comerciaban en paz con ellos, pero con el inicio de la minería empezaron a destruir la vegetación y acabar con los animales y rebaños que suponían el sustento de la tribu. Los paiute empezaron ha atacar a los colonos para defender su medio de vida. En los alrededores del lago tuvieron lugar dos importantes enfrentamientos entre colonos y paiutes que dejaron cientos de víctimas especialmente entre los nativos americanos.

Desde entonces muchas personas han oído voces, susurros y gritos extraños cuando se acercan al agua. Dice la leyenda que oír esas voces atrae la mala suerte. Los lugareños tienen un dicho: “Si oyes las voces tendrás mala suerte, si las ves: estás muerto”.
Estadísticamente parece que la maldición del lago Pirámide tuviera algo de cierto ya que son numerosas las personas que, especialmente en primavera, se han ahogado en sus cristalinas aguas o han desaparecido en la zona. También se han contabilizado un número inusual de accidentes automovilísticos y fallos en equipos electrónicos. Los escépticos creen que las desapariciones se deben, entre otras cosas, a las corrientes internas y a una posible red de túneles que comunica varios lagos de la región y que hace que no emerjan los cuerpos.