La antigua Mesopotamia era una vasta región en Asia occidental que se
conoce como la "cuna de la civilización" debido a la gran cantidad de
hazañas que la cultura logró.
La agricultura, la ganadería y la domesticación se desarrollaron allí
hace 8000 años. Para el año 3000 aC, crearon las ciudades más antiguas
conocidas del mundo e inventaron la rueda.
También aportaron con sus soluciones avanzadas para las necesidades
prácticas de una sociedad, se desarrollaron sofisticadas tradiciones de
rituales ocultos y brujería, que están claramente documentados en las
tabletas de Maqlú.
Un extenso registro
Se ha obtenido una visión profunda de la civilización mesopotámica a
partir de los cientos de miles de tablillas de arcilla inscritas con
cuneiforme, una de las primeras formas de escritura que dejaron. Cuando
los arqueólogos descifraban el cuneiforme a mediados del siglo XIX, esto
significaba que los textos como la Epopeya de
Gilgamesh podían finalmente ser accedidos y apreciados.
El encantamiento gula. La escritura en esta tablilla le pide a Gula y
Marduk (identificados por su nombre sumerio, Asalluhi) que ayuden a
curar a un paciente que se cree fue atacado por un fantasma.
(El Museo Metropolitano de Arte)
Los mesopotámicos fueron prolíficos en el alcance de sus escritos, y junto con la Epopeya de Gilgamesh,
la Biblioteca de Ashurbanipal también
contiene tabletas que detallan campañas militares, tratados, relatos
detallados del reinado de una monarca, Enûma Eliš (mito de la creación
babilónica) y observaciones astronómicas.
Las tabletas encontradas en otros lugares discuten códigos de leyes,
mapas, manuales médicos, comercio, disputas domésticas y correspondencia
diplomática.
Los textos ayudan a comprender la cultura y la sociedad mesopotámica,
pero entre miles de inscripciones relativamente mundanas, hay algunas
que sobresalen y destacan los aspectos más inusuales de la vida en la
antigua Mesopotamia.
¿Que es el Maqlú?
Maqlú,
que significa "quemar", es una obra compuesta alrededor del 700 a.C.
que abarca nueve tabletas en la cual se detalla una ceremonia la cual se
suponía debía frustrar y ahuyentar la magia maligna, proteger al
objetivo de la magia mala y debilitar a la persona responsable de lanzar
el hechizo o la maldición malévola.
Las primeras ocho tabletas presentan casi 100 encantamientos, y la
novena da instrucciones para el ritual. Es un trabajo destinado a ayudar
a un exorcista y su paciente.
Cilindro asirio que representa un exorcismo. (Wellcome Images
/ CC BY 4.0 )
Las tabletas de Maqlú dan instrucciones detalladas para quemar una
figura que representa a la bruja con el fin de ahuyentar los efectos de
su magia, y este ritual es el que da nombre a la inscripción.
Para que se haya creado un texto como Maqlú, tiene que haber alguna
necesidad en la sociedad mesopotámica de una guía como esta. ¿Qué nos
puede decir Maqlú sobre la brujería en la antigua Mesopotamia?
La Práctica de la Brujería Mesopotámica
Uno de los principales aspectos de la brujería que destaca Maqlú es el
anonimato de la bruja. Es interesante notar que la ceremonia no está
fijada en descubrir quién ha estado practicando la brujería y
maltratando al paciente, sino que elige reemplazar a la bruja con una
efigie sin nombre y confía en que los dioses sabrán quién es el objetivo
deseado.
También podemos aprender mucho del hecho de que, para contrarrestar la magia maligna, un exorcista realizó una ceremonia mágica.
Maqlú, junto con varios otros textos mesopotámicos, pinta un cuadro de
una sociedad donde la magia se practicaba de manera legítima y
abierta,de forma ilegítima y maliciosa.
Fragmento de talismán usado para exorcizar a los enfermos,en la era asiria. (Rama /
CC BY SA 2.0 )
Se implica que la magia malvada funcionó cuando los practicantes
engañaron a los dioses para que creyeran que estaban ayudando a una
necesidad genuina.
Se suponía que el ritual en Maqlú funcionaba al revelar el engaño a los
dioses para que revertieran lo que habían hecho para ayudar al malvado.
Pero también podemos construir una imagen de una sociedad en la que la
magia "buena" era una parte cotidiana de la vida para muchas personas.
Augurios Mesopotámicos
El Akkadian fue el lenguaje de la antigua Mesopotamia, y aunque varias
culturas antiguas utilizaron el cuneiforme durante varios milenios, se
estima que el 30% de las inscripciones cuneiformes acadias
supervivientes son sobre la brujería y lo sobrenatural.
Muchos
de estos no son brujería en la forma en que podemos pensar hoy en día
en forma de hechizos y rituales mágicos, sino de cosas que rodean lo
desconocido.
Aunque Mesopotamia fue notablemente avanzada en muchos aspectos, tales
como los cuerpos celestes y los fenómenos naturales impredecibles no se
entendieron completamente.
Estas cosas se consideraron a menudo como una forma de intentar predecir
y evitar eventos negativos y muchas de las inscripciones sobrevivientes
son intentos muy detallados de enumerar presagios y ayudar a evadir
desastres.
Un texto místico notable fue el Enuma Anu Enlil, que contiene detalles
alrededor de 7000 augurios celestiales relacionados específicamente con
el rey y el estado. Al rey se le enviaron actualizaciones y reportes
regulares de las predicciones por parte de sus eruditos personales,
quienes tenían la tarea de descifrar las premoniciones.
Tazón del encantamiento realizado en cerámica del período de Sasanian, 6-7th dc. (
Señales al Edén )
Otro conjunto de augurios es el Šumma ālu ina mēlê šakin, que consta de
120 tabletas de arcilla y más de diez mil presagios relacionados con el
hecho de que hay demasiados tipos de personas en un momento dado.
Quizás hoy estos presagios particulares sean vistos como sentido común más que esotérico.
Uno de los conjuntos de presagios más inusuales es el Šumma izbu. Estos
son augurios que están relacionados con nacimientos humanos deformes y
nacimientos animales extraños, como los animales unidos.
Los presagios no siempre fueron negativos y, a menudo, se vinculaba la
deformidad dependiendo la parte del cuerpo donde se encontraba: una
deformidad en el lado derecho era mala, pero en el lado izquierdo puede
haber sido visto como afortunado.
Magos Profesionales
Aunque mucha gente creía o practicaba magia rudimentaria, también había
magos profesionales en la antigua Mesopotamia. Estos magos profesionales
habrían sido especialistas en un campo particular de magia.
Algunos habrían sido especialistas en adivinación, mientras que otros habrían sido exorcistas profesionales.
Al igual que con otras sociedades antiguas, muchos de los que trabajaron
en un campo que no se entendía del todo se consideraban magos; por lo
que científicos, médicos y astrónomos se colocaron junto a místicos y
exorcistas.
Apkallu figura masculina con capucha de piel de pez.
Durante el período neo-asirio, los practicantes de la magia protegieron
los espacios interiores de los edificios al depositar un conjunto de
figuras debajo del piso de la habitación. Este artefacto probablemente
sirvió para esa función.
(Museo Metropolitano de Arte )
También
fue posible especializarse en estos campos. Un grupo de místicos que se
especializaron en una forma particular de adivinación fueron los bārû,
que hicieron predicciones basadas en la lectura de los hígados de
animales de sacrificio.
Evidencia de Magia en la Vida Cotidiana
Existe una tableta que proporciona evidencia de la brujería cotidiana,
enumera los tipos de piedras y sus asociaciones mágicas para que el
usuario sepa qué tipo de piedra debe llevar para atraer o disipar a
dioses y diosas en particular.
Más evidencia de la creencia y práctica cotidiana de la brujería es visible en una gran cantidad de artefactos sobrevivientes.
Figuras de barro que representan a dioses, animales y criaturas
místicas se han encontrado en hogares a través de Mesopotamia y a menudo
se las mantuvo escondidas en áreas de la casa que podrían haber sido
vistas como propensas al acceso de espíritus y demonios.
Y al igual que una representación de una bruja malvada podría usarse
para repeler su magia en un exorcismo, hay pruebas de que las mujeres
embarazadas llevaban colgantes con representaciones de la diosa
Lamashtu, quien era conocida por atacar a mujeres embarazadas y bebés,
en un intento de protegerse.
Fuera de su espíritu y proporcionar una forma de protección portátil contra ella.
Cuando se decodificó el cuneiforme por primera vez a mediados del siglo XIX, fue posible acceder a cientos de miles de textos.
Debe haber sido sorprendente saber que las personas en la antigua
Mesopotamia estaban tan avanzadas y que habían realizado tantos
descubrimientos significativos.
También debe haber sido un gran contraste saber que una sociedad que
hizo tantos saltos lógicos e intelectuales creyera tan ampliamente en la
magia, que muchos perciben hoy como irracional.
Pero tal vez la creencia mesopotámica en la magia debería considerarse,
en cambio, como una prueba más de su racionalidad e inteligencia. El
exorcismo ritual descrito en Maqlú puede ser objeto de burlar hoy, pero
le brindó consuelo y tranquilidad a la víctima.
Quizás lo más importante es que disipó y castigó a la bruja de forma
anónima, lo que evitó cualquier necesidad de una caza de brujas pública,
algo que hubiera terminado en violencia y confrontación.
Imagen superior: Hechicero en capucha de pie frente a una antigua torre
de Babilonia destruida con una ilustración de inundaciones, incendios y
huracanes (
breakermaximus / Adobe Stock)
